martes, 31 de enero de 2012

::Drugstore Cowboy::Dir::Gus Van Sant::Estados Unidos::1989::



La opera prima de Gus Van Sant, realizada en el año de 1985 se llama “Mala noche”, es la historia de un tendero homosexual quien busca en jóvenes indocumentados, satisfacer sus necesidades. Basada en los textos del poeta Walt Curtis, narra en blanco y negro, en 16 mm y con cámara en mano, una historia que marca en ciertos aspectos el modelo creativo que lo llevará a través de su carrera a ser el reconocido director de cine independiente norteamericano que es ahora.


                                                     "Mala noche" Gus Van Sant. 1985.



::Drugstore Cowboy::


Nos detuvimos un momento en la primera obra de este director para reconocer su trabajo y acercarnos un poco a la cinta de la que ahora hablaremos.
Teniendo en cuenta otras películas, como uno de sus más recientes filmes, “Elephant” 2003, tratamos de analizar algunos elementos comunes que hacen parte de la personalidad de Van Sant, uno de estos elementos son los jóvenes que con su particular ímpetu impregnan sus películas con el furor y la excitación dignas de una condición admirada, pero relegada siempre por distintos poderes temerosos de la explosión inesperada que puede surgir de una juventud inconforme con los estereotipos que ofrece un sistema poco creíble.


Eso es “Drugstore cowboy”, un western moderno, una cinta con una temática e imágenes que nos invitan a un viaje de regreso a  los años 70, un viaje donde Bob Hughes (Matt Dillon), es el líder de un grupo de adictos no sólo a las drogas, sino también adictos a asaltar de forma teatral las farmacias que proveen el material para esos otros viajes sensoriales que tanto necesitan.      


La película plantea un aspecto simbólico bastante relevante, es una especie de común denominador, son los sombreros que están por todas partes. “Nice hat” le dice Bob a una señora que camina por la acera cuando comienza la película. Es el momento de “dejar el sombrero sobre la cama”, sobretodo cuando se trata de renunciar a un mundo que no promete nada distinto a continuar una vida criminal para satisfacer la adicción. De todas maneras creo que es una decisión personal, así como lo hizo Bob en su momento, también su mujer Diane, Rick y Nadine, la chica más joven de la banda, quien decidió acabar con su vida en un viaje sin regreso.


Todo esto para la reflexión, de esa manera Bob decide rehabilitarse y empezar de nuevo, comenzar una vida nueva alejado del crimen y las drogas, a pesar de la tentación de las sustancias y la aptitud de su mujer al darse cuenta de su deserción.


En su intento por salir adelante sin nada en su cuerpo, conoce al reconocido escritor William Burroughs, quien, después de viejo y tras haberse iniciado en el universo infinito de la libertad sin prejuicios a los 40 años, intenta también salir de la adicción. 


Van Sant trabaja en un cortometraje de nueve minutos hecho siete años antes de esta película, llamado “Do Easy”, basado en un cuento del escritor que plantea que las cosas también pueden hacerse de la manera más fácil, así, sin complicaciones.

Gus Van Sant

“La forma más fácil, más relajada, es la más rápida y la más eficiente”, tomar conciencia de que “cada objeto que tocas está vivo con tu vida y tu voluntad”. En los detalles está la maestría: “¿cómo puedes pilotear una nave espacial si no puedes encontrar tu camino en tu propio apartamento?”, cuyo acercamiento al nirvana es “la disciplina final de no hacer nada, aquel que ha aprendido a hacer nada con todo su cuerpo y mente, tendrá todo hecho para él”. Y la clave para manipular los objetos: “deja caer fríos dedos posesivos como un viejo policía haciendo un suave arresto”. (Cita de cita. Pijamasurf.com)

"Do Easy" Gus Van Sant. 9min.

Si embargo, después de este corto, al escritor se le reconoce su papel como actor en Drogstore Cowboy, en una buena idea que tiene el director para recrear y darle al mismo tiempo una mirada al pasado a través de los ojos y la memoria del mismísimo William Burroughs.

Inteligente es la forma que le da Gus Van Sant a esta, su segunda película, al mezclar la literatura con una generación supuestamente perdida llamada Generación “Beat”, pero que situó de manera muy libertaria una especie de paradigma en cuanto al comportamiento juvenil de la época, en relación con una sociedad que a pesar de las “libertades” dadas por un sistema que lo puede “dar todo”, sólo si te portas bien, pero que al mismo tiempo se convertía en una sociedad mucho más represora y controladora en contra de las nuevas generaciones librepensadoras que surgían en la década de los 70s.     





JaimeRicaurte.

viernes, 27 de enero de 2012

::Nord::Norte::Dir::Run Destand Langlo::Noruega::2009::


Ahora es un padre quien busca a su familia, a su hijo. Jomar, un esquiador profesional decide emprender un viaje por los inhóspitos paisajes de su país y sus gélidos caminos. Usando una moto de nieve decide abandonarlo todo para reencontrase con esas otras soledades, para encontrarse de nuevo con su ser espiritual y luego con el amor.
Nord, es un road movie que alcanza a contarnos en sólo 78 minutos, las historias de vida de personas solitarias que por distintos motivos han dejado de sentir la presencia de los otros. De ellos aprende que no es el único, que su realidad no es la única, que existen otras oportunidades para el compartir, para la esperanza, para la calidez que se siente el tener contacto con los demás.


La opera prima de Rune Destand Langlo, aborda el tema de la soledad como una nueva narrativa que propone la sencillez con la que se puede hacer un largometraje y donde lo profundo está en esas pequeñas historias que encuentra este viajero solitario que acompaña y es acompañado. Historias que plantean en cierta forma las distintas etapas de la vida por las que han pasado ya algunos, y otros apenas emprenden. Hablamos de todos esos momentos en los cuales nos sentimos solos y que pueden llegar a ser varios en la vida de cada uno de nosotros.


Todas estas personas que conoce Jomar en su viaje, somos nosotros en la vida real. Ellas, tal vez sean un ejemplo vivo de la ingenuidad de cuando éramos niños,  de la pubertad y adolescencia que nos confunde al no querer ser niños y desear ser adultos, de la adultez que trae responsabilidades que de todas formas hay que asumir, queriendo de alguna manera volver a nacer, o morir más bien decididamente con un final digno de seres que ya lo han entregado todo.


Por lo demás, vemos siempre que nos necesitamos los unos a los otros, fuera de esas falsas y egoístas formas de pensamiento moderno donde la desconfianza reina por doquier, donde, a la muerte se le naturaliza y a la vida se le valora cada día menos. Jomar, decide ir al norte a buscar a su hijo y es entonces cuando esa decisión lo hace más grande, más sabio, más elocuente, a pesar de los extraños y arcaicos métodos para emborracharse, afeitando su coronilla, lijándola y fijando con cinta un tampón humedecido con alcohol. Todos tenemos algo que enseñar a los demás, siempre tenemos algo que aprender de los demás.


Buena película que nos enseña a aprender, la vida no tiene y nunca tendrá un manual que nos indique qué debemos hacer y cuál es la vida perfecta, el resto son ilusiones. Lo que si es cierto, es que a pesar de las adversidades la vida es una toma de decisiones constante, que se puede ser firme, enmendar los errores y hacer con determinación lo que el miedo, la duda y la pereza no han podido hacer y nunca harán.




JaimeRicaurte.


lunes, 23 de enero de 2012

::Estación central de Brasil::Dir::Walter Salles::Brasil::1998::

  
En la sofocante vida de Río de Janeiro se encuentra la Estación Central, allí, en ese concurrido lugar lleno de gentes de todas partes empieza esta historia que llevará a un niño llamado (Josué) a buscar a su padre a través de un viaje con determinación y empeño, donde la sangre que los une es más fuerte que la muerte.


Dora, una mujer que solía ser maestra se gana la vida redactando cartas a personas analfabetas que acuden a ella para ser escuchadas y con la intención de ser leídas en esos distintos lugares a donde sus mensajes son supuestamente dirigidos. Esta escribana, como comúnmente se les llama a personas como Dora, es una especie de negociante de la vida, sabe que, si comunica, puede  cambiar un poco el rumbo de algunas vidas, pero deja a su criterio quienes reciben las notas que ella misma escribe.  Josué queda huérfano después que su madre ha sido atropellada por un bus, y es Dora quien a pesar de su dureza y fría personalidad decide acompañar al niño por un viaje a donde no sólo se encontrará ella misma, sino también encontrará el verdadero sentido de sus vidas.


Estación Central invita a reflexionar un poco acerca de la situación de vulnerabilidad en la que se encuentra la infancia de los países del “nuevo” continente, de ese nuevo mundo al que mal llamamos “tercero”, un mundo al que siempre llegan tarde las políticas públicas relacionadas al bienestar de esa gran población, la cual llamamos el futuro de nuestras sociedades. Un mundo que no sabe planear, un mundo que no sabe reconocer las distintas manifestaciones cotidianas de los problemas que traen el subdesarrollo y la pobreza encarnada en un día a día lleno de crudezas, limitaciones y falta de oportunidades.


La vulnerabilidad a la que están expuestos los niños y niñas de los países del sur, no sólo de América Latina sino también los del sur de África, es una muestra de que este mundo en que vivimos está construido por adultos y para los adultos, no caben en ningún momento, siendo muy importantes, las opiniones de esos pequeños seres que hacen que la vida tome el camino de la esperanza, hacia otros rumbos distintos, donde prime la dignidad, la inclusión y la armonía entre iguales con la naturaleza.   


Sin embargo, la película nos muestra otros elementos que de forma importante se unen a un conjunto de problemáticas evidenciadas en la cotidianidad de la pobreza y el crecimiento de la población. Uno de estos aspectos, es la relación que tienen el crecimiento de las ciudades y su población con la falta recursos, recursos que vayan acordes con los planes de masificación del transporte público para cobertura total, no parcial, de toda la ciudadanía. También está el analfabetismo, tanto en las zonas rurales como en las urbanas; el problema de la justicia por cuenta propia, la supresión de vidas delincuentes por un control separado de toda institución pública que regule esta clase de situaciones. Está también la fuerte y arraigada representación religiosa en búsqueda de las respuestas que den soluciones a esa gran crisis existencial que traen los tiempos modernos.  


Salles, director de otros Road Movies como “Diarios de motocicleta” 2004 y “On the road” 2011 su más reciente película y además de obras como el segmento en “Paris je t’ime”  “Loin du 16e” 2006, es uno de los cineastas más reconocidos de Brasil, adquirió renombre después de “Tierra Estrangeira” 1995.


Esta cinta admite su propuesta por la transformación a partir de retomar valores como la tolerancia, el compromiso, la amistad y la ternura que despierta un niño al mostrar ser muchas veces más decidido que un adulto. Nos muestra la grandeza del amor, de un amor que por encima de intereses banales, lucha y resiste por el reencuentro de la sangre.  



JaimeRicaurte.

lunes, 16 de enero de 2012

::Im Juli::In July::Dir::Fatih Akin::Alemania::2000::



                                                  ¿En cuál dirección está el amor?



Si me preguntaran cómo describiría yo a Fatih Akin en una sola palabra, seguro usaría un calificativo bastante común pero que pocos tienen el derecho de ostentar. Genial, después de su trabajo es esa palabra la que hace grande a un director de cine como estos y eso lo hace un maestro, porque piensa en todo, en todos, en cada cosa, cada detalle y lo muestra de una manera inteligente, capaz de hacernos creer que somos nosotros los protagonistas de sus fascinantes películas.


El mismo director de “Contra la pared”, se adentra en un viaje en búsqueda del amor,  un amor que es perseguido por un profesor de física a quien no le ha ido muy bien en esos asuntos, él es Daniel (Moritz Blebietreu), protagonista de una muy buena cinta alemana entre otras, “El Experimento”. Éste hombre conoce a Juli (Christiene Paul) en una feria callejera, allí establecen repentinamente una conversación alrededor de un anillo que parece tener los “poderes” necesarios para cambiar la vida amorosa de las personas.  Una especie de código secreto marcado por un sol, la luz que le dejará ver aquel amor que tanto ha anhelado.


Este soberano realizador alemán de origen turco, es conocido por sus cintas de tipo dramático. De todas formas plantea también una comedia definitivamente con gusto, sabemos que el humor cambia de acuerdo al contexto, es más efectivo alrededor de lo que ya conocemos y estamos acostumbrados. Pero Akin nos hace sentir que el humor contiene tintes universales que mezclados con el amor, no sólo coinciden en las dos últimas letras de estas excitantes palabras, sino también con sus significados y significantes en el mundo entero.


Es necesario decir que esta película no es totalmente una comedia, una historia de amor ni de humor, aunque contenga cierto estilo dentro del género mismo. La verdad es que, a través de la trayectoria cinematográfica de algunos directores se puede, con la ayuda del Road Movie, encontrar los pasos que se extienden por toda una geografía de lo humano sobre sus territorios, sus conflictos, sus divisiones, sus problemas políticos, sociales y culturales en el marco desestructurado que generan las guerras, la pobreza, la corrupción y las falsas apariencias, paradójicamente mezcladas con paisajes hermosos y mujeres de ensueño.


Puede ser que el amor se convierta en una excusa, generalmente las obras que sostienen dicha temática tienen más posibilidades dentro de un mercado que siempre está ávido de historias parecidas, el amor, pero con la particularidad que propone el director y la diversidad que proponen las músicas del mundo, los días calurosos y festivos, la sensualidad de las féminas, la sencillez al relacionarse con el otro y a la vez lo complicado de esas mismas relaciones, que no son otra cosa que los primeros encuentros entre las personas, donde la verdad, no se sabe de qué manera y con total normalidad, reaccionaremos.      


No es difícil identificarse con este señor director, sobretodo si sacamos a flote ese indomable carácter de seres callejeros, caminantes, viajantes y aventureros. Dentro de esas tipologías manejadas por Akin, se plantean las personalidades de muchos hombres y mujeres que no quieren quedarse en uno sólo lugar esperando a que llegue su “príncipe azul” o “princesa rosada”, esa falseada “media naranja” que tanto ha hecho daño a las culturas mediatizadas del diverso mundo moderno.    










En pocas palabras y para resumir la genialidad de éste director y sus actores, podríamos hacer una lista interminable de calificativos y entre ellos, resaltar la amistad, el encuentro con el otro como una forma de relacionarse parecida a cuando éramos niños, como cuando sin conocernos previamente, la invitación era a jugar ingenuamente pero con la seriedad y formalidad que caracteriza al contrato mismo a pesar de lo jodido que pueda estar el mundo entero, a pesar de esa poca confianza, se viven el optimismo, la naturalidad y la fuerza necesarias para seguir caminando, rodando en un mar de historias por conocer y personas por valorar.   

Fatih Akin


Reparto:

Moritz Bleibtreu…Daniel Bannier.
Christiane Paul…Juli.
Mehmet Kurtulus…Isa.
Idil Üner…Leo.
Branka Katic…Luna.
Birol Ünel…Camarero.
Sandra Borgmann…Marion.
Ernest Hausmann…Kodjo.
Gábor Salinger…Vendedor de mercadillo.
Cem Akin…Guardia de frontera turco.
Fatih Akin…Guardia de frontera turco.


JaimeRicaurte.